P A U S E

PAUSE

por JAVIER SACO


El curso 19/20 había empezado como siempre, con caras nuevas en la tutoría de 4º de la ESO y con las dudas lógicas de enfrentarnos de nuevo a un proyecto de cine. Todavía estaba reciente la gran acogida cosechada por "La Buena Elección" en el Fancine de Lemos y nos parecía muy complicado poder alcanzar de nuevo un resultado tan completo en todos los aspectos, entendiendo el contexto en el que nos movemos, sin ayuda profesional, con tiempo y medios muy ajustados, y la carga de trabajo propia de profesores y alumnos.

Pero un buen día, todo cambió. Un vídeo recuperado de la etapa de primaria sirvió de inspiración para plantear una historia que, si bien no tenía la complejidad del planteamiento final, sirvió para encender la mecha de la creatividad.

Además, mi amigo César Fernández Luna aceptó mi invitación y se unió al proyecto de forma incondicional. César fue determinante para llevar a buen puerto este proyecto, no sólo por el talento que nos deja en todas sus apariciones como el malvado encapuchado, sino por el espíritu emprendedor y constructivo del que hizo gala en todo momento.

Con César el proyecto ya resultó imparable. Y lo fue a pesar de todas las dificultades que nos encontramos, muchas más imprevistos de los que cabría esperar, que culminaron en el mayor de los problemas: la pandemia de covid-19.

Pero, a pesar de todo, lo hicimos.

Y este fue el resultado:

(ojo, en adelante hay spoilers):


Este corto fue rodado entre Sober y Monforte con una producción muy compleja, teniendo en cuenta las circunstancias en las que nos desenvolvemos, sin contar con subvenciones ni ayuda profesional.

Un aspecto importante de este corto son las localizaciones. Procuramos elegir las épocas adecuadas para mostrarlas en todo su esplendor, por lo que la mayoría de las escenas de exteriores fueron filmadas entre diciembre y enero, incluyendo las escenas de niebla, y debiendo gestionarse los permisos pertinentes para el acceso a algunas zonas (como la grabación en lo alto de la torre de la Judería).

La parte que consideramos más gratificante del proyecto fue la manera en la que superamos las dificultades, que fueron mucho más allá de la propia pandemia que irrumpió en marzo.

Así, la zona del puente que figura en el cartel (y que sirvió de inspiración para esta parte de la historia), se derrumbó de forma inesperada en el tramo que nos interesaba, junto al riachuelo que lo bordea. Esto sucedió pocos días antes del rodaje previsto en la zona. Aunque buscamos localizaciones alternativas, finalmente esperamos a su reparación, que se prolongó un par de meses.

En esta reparación de la calzada, y también de modo inesperado, el puente fue reformado completamente, de modo que se borraron todos los grafitis existentes y perdió el aspecto vetusto y siniestro que tenía, cualidades idóneas para la escena que queríamos grabar.

En consecuencia, decidimos hacer nosotros un nuevo "grafiti", sin alterar en absoluto el aspecto del puente reformado, por lo que que sería "de quita y pon", para situarlo en el puente sólo bajo demanda, cuando hubiese que rodar. Para lograrlo, pintamos la imagen sobre un gran cartón y de este modo conseguimos un efecto más que convincente, además de adecuarlo a la temática que nos interesaba.

Pero, sin duda, la aparición de la pandemia de covid-19 y el confinamiento decretado a mediados de marzo fue el mayor imprevisto.

Afortunadamente, para entonces habíamos avanzado todas las secuencias de exteriores, dado que buscamos rodarlas en invierno para transmitir la sensación de frío y desasosiego que se percibe a lo largo de toda la historia.

Es preciso señalar que todas las imágenes que se muestran de Monforte sin gente y desierto fueron grabadas entre diciembre y enero, antes de la pandemia y sin la menor idea de que ésta se iba a producir, puesto que este concepto de mostrar las calles vacías ya estaba presente en el guion desde el principio.

¡Quién nos iba a decir que unos meses después iba a pasar de verdad!

Finalmente, lo más importante es que siempre encontramos una forma de salvar las dificultades que nos encontramos, incluso consiguiendo un resultado mejor del inicialmente previsto, siendo este el aspecto del corto del que quizá nos sintamos más satisfechos.

Por desgracia, y a pesar de conseguir finalizar el montaje antes de julio, no pudimos estrenar el corto en el Fancine de Lemos, tal y como estaba previsto, puesto que la edición de 2020 tuvo que ser suspendida como consecuencia de la pandemia.

No obstante, mantenemos la esperanza de poder proyectarlo en la edición de 2021, que ya ha sido confirmada.

¿LO SABÍAS?

  • Los vídeos con los que arranca el corto son reales y corresponden a la etapa de primaria de los protagonistas. La imagen de César fue incorporada para el corto, y fue grabado con la misma cámara utilizada entonces para conseguir un efecto lo más natural posible.

  • La camiseta que lleva puesta Claudia al despertarse es la misma que llevó Nuria Fernández en 'La Buena Elección', y hace referencia al álbum 'The Wall' de Pink Floyd.

  • La roca "con forma de sapo" existe de verdad y se encuentra en la zona de los Muíños do Xábrega (Sober).

  • La película a la que se refiere Claudia es una clara referencia a 'Origen', de Christopher Nolan.

INTERPRETACIÓN DE LA HISTORIA

Hay quien puede considerar esta historia un tanto enrevesada. Personalmente creo que no es para tanto, pero sea como fuere, os dejamos con la explicación oficial y detallada de la historia, advirtiendo por supuesto de que se trata de un SPOILER TOTAL que por supuesto debes evitar si quieres ver el corto, y aún no lo has hecho.

Si, por el contrario, quieres conocerla, despliega la flecha que figura a la derecha de este texto, y te la contamos:

Claudia siente curiosidad por el extraño individuo que aparece en el vídeo del principio, y al que cree reconocer de haberlo visto en la zona del puente. Parece claro que Inés ha forzado ese encuentro visual, la trampa ya está tendida, y Claudia va a caer en ella.

El gancho definitivo es el extraño sueño que tiene Claudia y que, en cierto modo, es algo premonitorio de lo que le va a pasar si sigue adelante. Asumimos aquí que César tiene algún tipo de "poder" por el cual consigue manipular la mente de Claudia, y provocarle esa curiosidad que hace que quiera ir a su encuentro. En este punto, el público podría pensar que Claudia es la que puede meter en un lío a la inocente Inés, cuando en realidad es exactamente lo contrario: Inés finge cierta inocencia y preocupación por Claudia, pero la va a acompañar conscientemente hacia su cruel destino.

Tras el encuentro de Claudia con el malvado personaje en el puente, Inés sigue a la caza de más víctimas. Para ello, manipula una vieja fotografía para que los 3 chicos que aparecen en la secuencia siguiente sientan curiosidad de nuevo por ese extraño personaje.

Este es el momento en el que Inés nos descubre quién es exactamente, y lo hace mirándonos a la cara sonriendo porque, en definitiva, nos ha engañado a todos. Poco a poco, nos vamos acercando a la tenebrosa guarida del "monstruo" y todo va cobrando sentido. Las imágenes del sueño de Claudia eran reales, aunque el final que le espera a la pobre Claudia es aún peor de lo que se espera.

Pero, ¿qué es exactamente lo que le sucede a Claudia tras el macabro ritual?

Bien, parece que ella se despierta y que todo lo que hemos visto puede haber sido un sueño. De hecho, se dirige rápidamente a la habitación de su hermano pequeño y, aparentemente, todo va bien. Pero, de repente, el pequeño se queda quieto y nos preguntamos ¿cómo puede quedarse tan quieto un bebé de apenas 1 año?

Tras el cartel del final y, a modo de epílogo, se nos muestra la cruda realidad: Claudia es capaz ahora de paralizar a sus presas, por lo que tras el ritual ha debido convertirse en el mismo "ser" que el interpretado por César. Lleva a su propio hermano en brazos y cabe preguntarse qué va a hacer con él. Bueno, quizá eso sea demasiado terrible para verlo, lo mejor es que cada cual se imagine lo que quiera.

De hecho, esta es nuestra interpretación oficial del corto pero, por supuesto, cada cual puede tener la suya propia. Lo mejor de todo, es que nos haya hecho pensar, algo que en El Rincón de Leonardo nos gusta por encima de todo.

En definitiva, PAUSE ha sido un proyecto ambicioso y difícil, que ha supuesto mucho esfuerzo y dedicación, pero que al a postre ha resultado ser una experiencia maravillosa, en el año donde ni siquiera el covid-19 ha podido detenernos.

Nos preguntamos si será el último proyecto que hagamos con este nivel de implicación, por la exigencia que requiere. Pero mientras sigamos encontrando una buena idea y la motivación suficiente para llevarla a cabo... ¿por qué no?

Si algo tenemos claro es que HA VALIDO LA PENA.